martes, 30 de diciembre de 2008

Películas vistas en 2008

Poco que contar aquí. Si ayer me quejaba de que había leído poco, de cine mejor ni hablamos...
  1. Kagemusha (Akira Kurosawa, 1980)
  2. Desayuno con diamantes (Blake Edwards, 1961)
  3. Manticore (Tripp Reed, 2005)
  4. El silencio de los corderos (Jonathan Demme, 1991)
  5. Tora! Tora! Tora! (Richard Fleischer, 1970)
  6. Sweeney Todd (Tim Burton, 2007)
  7. Rashomon (Akira Kurosawa, 1950)
  8. Jesucristo Cazavampiros (Lee Demarbre, 2001)
  9. Juno (Jason Reitman, 2007)
  10. Iluminados por el fuego (Tristán Bauer, 2005)
  11. El bosque animado (José Luis Cuerda, 1987)
  12. Love and Honor (Yôji Yamada, 2006)
  13. Padre de Familia presenta Blue Harvest (Dominic Polcino, 2007)
  14. Rebobine, por favor (Michel Gondry, 2008)
  15. Futurama: El gran golpe de Bender (Dwayne Carey-Hill, 2007)
  16. DOA: Dead Or Alive (Corey Yuen, 2006)
  17. La felicidad de los Katakuris (Takashi Miike, 2001)
  18. The Man from Earth (Richard Schenkman, 2007)
  19. Iron Man (Jon Favreau, 2008)
  20. La comedia sexual de una noche de verano (Woody Allen, 1982)
  21. Persépolis (Marjane Satrapi y Vincent Paronnaud, 2007)
  22. Vexille (Fumihiko Sori, 2007)
  23. Futurama: The Beast with a Billion Backs (Peter Avanzino, 2008)
  24. Kung Fu Panda (Mark Osborne y John Stevenson, 2008)
  25. Hancock (Peter Berg, 2008)
  26. X Files: Creer es la clave (Chris Carter, 2008)
  27. Wall·E (Andrew Stanton, 2008)
  28. El caballero oscuro (Christopher Nolan, 2008)
  29. Quemar después de leer (Ethan Coen y Joel Coen, 2008)
  30. El reino prohibido (Rob Minkoff, 2008)
  31. Ciudad de Dios (Fernando Meirelles y Kátia Lund, 2002)
  32. Futurama: El juego de Bender (Dwayne Carey-Hill, 2008)

lunes, 29 de diciembre de 2008

Lecturas del 2008

Aunque todavía quedan más de veinticuatro horas para que termine este año 2008 ya puedo ir colgando aquí la lista definitiva de mis lecturas a lo largo de estos últimos doce meses. Desgraciadamente no han sido tantas como me había propuesto, pero en los últimos tres meses del año me puse las pilas y recuperé ligeramente el ritmo.

A ver si en el 2009 organizo mejor mi tiempo y puedo leer un poquito más...

Libros

  1. Polen (Jeff Noon)
  2. El Universo Elegante (Brian Greene)
  3. Pantaleón y las visitadoras (Mario Vargas Llosa)
  4. La guerra de Charlie Wilson (George Crile)
  5. Cuentos de humor y de horror (Saki)
  6. El bosque animado (Wenceslao Fernández Flórez)
  7. El castillo en el bosque (Norman Mailer)
  8. Sauce ciego, mujer dormida (Haruki Murakami)
  9. El asombroso viaje de Pomponio Flato (Eduardo Mendoza)
  10. Las benévolas (Jonathan Littell)
  11. Ultramaratón (Dean Karnazes)
  12. La suerte de Jim (Kingsley Amis)
  13. La maravillosa vida breve de Óscar Wao (Junot Díaz)
  14. Vida y destino (Vasili Grossman)
  15. Un grito de amor desde el centro del mundo (Kyoichi Katayama)
  16. El mal de Portnoy (Philip Roth)
  17. What I talk about when I talk about running (Haruki Murakami)
  18. Un hombre en la oscuridad (Paul Auster)
  19. Tras do solpor (Haruki Murakami)
  20. Los mitos de Cthulhu (H.P. Lovecraft et al.)
  21. El Sha (Ryszard Kapuściński)
  22. Los hombres que no amaban a las mujeres (Stieg Larsson)
  23. Primer amor, últimos ritos (Ian McEwan)

Cómics

  1. Blacksad - Un lugar entre las sombras (Juanjo Guarnido y Juan Díaz Canales)
  2. Bone - Rock Jaw, señor de la frontera oriental (Jeff Smith)
  3. Bone - La cueva del anciano (Jeff Smith)
  4. Cash: I see a darkness (Reinhard Kleist)
  5. ¡Shazam! La monstruosa sociedad del mal (Jeff Smith)
  6. Batman - La broma asesina (Alan Moore y Brian Bolland)
  7. Give me liberty (Frank Miller y Dave Gibbons)
  8. Batman - Año Uno (Frank Miller y David Mazzucchelli)
  9. Batman - El largo Halloween (Jeph Loeb y Tim Sale)
  10. Fábulas - Leyendas en el exilio (Bill Willingham y Lan Medina)
  11. Y, el último hombre (Brian K. Vaughan y Pia Guerra)
  12. Blacksad - Artic Nation (Juanjo Guarnido y Juan Díaz Canales)
  13. Blacksad - Alma Roja (Juanjo Guarnido y Juan Díaz Canales)
  14. Bone - Círculos fantasma (Jeff Smith)
  15. Crónicas Birmanas (Guy Delisle)
  16. Batman - Año 100 (Paul Pope)
  17. The Un-Men: ¡Saca el engendro que llevas dentro! (John Whalen y Mike Hawthorne)
  18. Yo maté a Adolf Hitler (Jason)
  19. Café Budapest (Alfonso Zapico)
  20. Gorazde: Zona Protegida (Joe Sacco)
  21. Bone - Buscadores de tesoros (Jeff Smith)
  22. Gotham Central - Servir y proteger (Ed Brubaker, Michael Lark y Greg Rucka)

Si tuviese que elegir una lectura favorita me quedaría con La maravillosa vida breve de Óscar Wao, una verdadera joya que debería leer todo aquél que pretenda llegar a entender cómo funcionan las enfermas cabecitas de esos frikis con escasas habilidades sociales como, por ejemplo, éste que les escribe... Eso en cuanto a libros. En cómics el premio se lo daría a Y, el último hombre, que me tuvo absolutamente enganchadísimo durante este verano...

En fin, en total suman 45. A ver si el año que viene puedo llegar a los 50. Un número mucho más redondo y más bonito, dónde va a parar :P

Por cierto, las lecturas entre libros y cómics han quedado curiosamente repartidas en un fifty-fifty casi perfecto. ¿Es ése el concepto de equilibrio de la virtud aristotélica que me enseñaron en el instituto? ¿Existe el bosón de Higgs? ¿Cuánto son cuatrocientos dracmas? Son tantas preguntas...

martes, 16 de diciembre de 2008

Festival del humor



La falta de sueño hace que desvaríe más de lo habitual...

miércoles, 3 de diciembre de 2008

La frase del día (VIII)

(...)me sorprendió que fuese tan adulto, tan serio e irónico. Para mí un cómic siempre era algo parecido a Mortadelo y Filemón

Paz Vega, hablando sobre su participación en la adaptación al cine de The Spirit.

La única manera de hacer más abracadabrante esa frase sería cambiando la palabra "cómic" por "libro" y la referencia a "Mortadelo y Filemón" por otra a "Teo en avión"...

¡Cuántos prejuicios sueltos!

martes, 2 de diciembre de 2008

Joe Sacco

Uno de los lugares con más densidad de población que se me ocurren, más aún que la muy madrileña Plaza de Callao durante estas fechas pre-navideñas, es el Olimpo al que elevo a aquellos creadores que idolatro fruto de mi escasísimo umbral de admiración y de mi legendaria compulsividad. Lugar mítico en el que Joe Sacco ha renovado por una buena temporada la concesión de su parcelita tras el buen sabor de boca que me ha dejado la reciente lectura de Gorazde, el que para muchos es su mejor trabajo.

Sacco es un autor de cómics norteamericano, aunque nacido en Malta, que cultiva en sus obras un personalísimo estilo documental bastante alejado de los lugares comunes del noveno arte. Gráficamente su estilo típicamente underground recuerda irremediablemente a Robert Crumb, y los guiones (salvando las distancias, que incluso en mi Olimpo hay clases) al maestro de maestros Ryszard Kapuściński.

Porque las historias que nos cuenta Sacco son un cóctel compuesto básicamente por memorias, cuadernos de viaje y periodismo. Sí, periodismo. Por mucho que el prologuista de la edición española de Gorazde se empeñe en negar la mayor. Si lo que hace Sacco no es digno de ser llamado periodismo, vive Dios que lo que hacía Kapuściński tampoco lo era.

Colgarle la etiqueta de "periodístico" tampoco significa que en sus cómics se encuentren verdades absolutas sobre los temas que trata. Es más, ni siquiera lo pretende. Sacco plasma en viñetas una visión personal de la realidad basándose en sus propias experiencias y en los testimonios que va recabando. Ése es un dato a tener muy en cuenta antes de adentrarse en sus páginas, principalmente cuando las zonas de las que habla viven situaciones tan complejas como las de la ex-Yugoslavia (Gorazde, El final de la guerra, El mediador) u Oriente Medio (Palestina).

Una vez puestos sobre aviso de que en estas páginas el blanco y negro no se refiere sólo a la ausencia de color en los dibujos estaremos listos para adentrarnos en estremecedoras historias sobre el sinsentido de las guerras (mayor si cabe en el caso de las fratricidas), sobre lo hideputa que puede llegar a ser el hombre y, principalmente, sobre cómo es un día normal de una persona normal que vive en unas condiciones a años luz de la normalidad.

Historias, a fin de cuentas, de buenos y malos.

¿Subjetivas? Sí, y mucho.

¿Menos válidas por ello? No.

Ni muchísimo menos.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Un día en las carreras. Episodio V: El Retonno del Runner

Parece ser que Philip K. Dick describió su primera (y última) experiencia con el ácido como algo semejante a un descenso a los infiernos, lugar del que le costó unos cien años salir. O al menos eso es lo que cuenta Emmanuel Carrère en Yo estoy vivo y vosotros estáis muertos, su fantasiosa biografía del escritor norteamericano.

En mi caso el billete de ida al infierno no venía en forma de psicotrópico sino de lesión. Y afortunadamente salir de mi pesadilla no me llevó un siglo, aunque sí unos suficientemente interminables cinco meses de dolor, desesperación y falsas esperanzas.

Ayer día quince terminaba la prohibición absoluta de correr que me había impuesto Alba, mi ángel de la guarda tendinal, cuando acudí a Torrado buscado ya más respuestas que soluciones. Tras reposo, masajes (en los que descubrí el dolor que puede llegar a causar una embarazada, que hasta ese momento creía que eran seres de pura bondad incapaces de infligir daño a nadie), rehabilitación y otras hierbas empecé a recuperar poco a poco mis maltrechos tobillos. Y el día de ayer estaba marcado con un gran círculo rojo en el calendario.

Con mi particular versión de Pepito Grillo encaramada al hombro salí a trotar ayer por primera vez en mucho tiempo. Estaba nervioso. Incluso se podría decir que tenía miedo. Había pasado ya por varias falsas alarmas de recuperación en los últimos meses que habían terminado en nuevas recaídas. Pero mi nuevo yo es más sensato. Y cuando no lo es hace caso inmediatamente a los berridos que le llaman al orden cuando se embala de más o pretende saltar sobre sus endebles tobillos. Corrí cinco kilómetros relajados tras lo que no sentí la más mínima molestia. Ahí empecé a creer que tal vez esté por fin en la senda de la recuperación.

Y esta mañana la prueba de fuego. Una serendipia del destino provocó que justo el día después de mi retorno al asfalto hubiese una popular de poco menos de 6K prácticamente en la puerta de mi casa residencia.

Y ahí que me fui de cabeza. Que mi nuevo yo es más sensato pero tampoco tanto. Disfruté como un enano al verme de nuevo en el ambiente de las populares y entendí un poco mejor por qué había echado esto tanto de menos durante los últimos meses. Una buena motivación para cuidarme y evitar volver a tenerme que pasar otra temporadita de barbecho...

Sobre mi carrera poco que contar. A pesar de no ir a tope terminé rematadamente cansado ya que lógicamente mi forma y mi fondo están a años luz de las que tenía cuando me rompí. Pero hoy la cosa no iba de eso. Pasé ampliamente del pulsómetro, de los minutos por kilómetro y de todas esas zarandajas. Se trataba de disfrutar nuevamente del básico placer de correr por correr. ¿Es posible que durante estos meses me haya curado un poco de mi anterior marquitis? Ojalá sea así. Está bien tener datos de los entrenamientos, pero a veces miraba tanto para el pulsómetro que me extraña que nunca me haya comido una farola. Crucé la meta después de 26 minutos, cansado pero con una sonrisa bobalicona en la cara en la que se podía leer un "¡estoy de vuelta!" lleno de felicidad :)

Pero que no haya mucho que contar sobre mi carrera no quiere decir ni muchísimo menos que esta popular esté condenada a caer en el olvido más pronto que tarde, sino todo lo contrario. El día de hoy ha sido, como diría Barney, legen -wait for it- dary. ¿Por qué? Pues porque fue la ocasión escogida por mi no-tan-joven-padawan Anabel para debutar en una popular. ¿Es esa nimiedad la causa de la legendaridad? Evidentemente no, pero algo ayuda. La guasa del asunto está en que llegó en una más que rezagada última posición, con lo que técnicamente durante sus buenos cinco minutos la arteria principal de este poblacho estuvo cortada al tráfico única y exclusivamente para ella. Pero, ojo al dato, sólo había otra chica inscrita en la categoría sénior femenina. Así que no sólo fue última, sino que además fue segunda de su categoría. Así que subió al podio, recibió las felicitaciones de los concejales del Ayuntamiento y le dieron un trofeo. Una única carrera y ya tiene mejor palmarés del que puedo soñar. Injusto, pero jodidamente divertido.

Ver a mi aprendiz subida al segundo cajón del podio me hizo darme cuenta de que la frontera entre la satisfacción y la humillación es demasiado sutil como para que los alexitímicos vocacionales la discernamos claramente...

En fin, un buen día. Unos volvemos a asomar tímidamente la cabecita en el apasionante submundo de las populares, y otras entran en él cual elefante en una cacharrería.

Así es la vida.

Próxima estación, cross de la UAX. Correspondencia con el Circuito Madrileño de Cross Universitario. Precaución: llegada en cuesta.

lunes, 10 de noviembre de 2008

¡Ya sé qué quiero por Reyes!

Impresionante robot tricerátops para ser el más fardón del barrio mientras te das un garbeo encaramado a su robótica chepa.

En el siguiente vídeo se aprecia el bicho en toda su asombrosidad:

Por lo que he leído el trebello aguanta el peso de un niño de hasta 27Kg así que la única opción que tengo para poder disfrutarlo pasa por bajar unos 30Kg, lo cual por desgracia es ligeramente incompatible con mis planes de seguir vivo hasta al menos terminar la carrera. Jooo, ¿por qué no había estas cosas cuando era niño?

Juguetes como éste le despiertan a uno el instinto paternal... El pequeño Xerxes¹ sería la envidia del parque xD Porque todos sabemos que los mejores regalos que los padres hacen a los niños son los que en realidad siempre han querido para ellos mismos. Sí, todavía estoy traumatizado por ese Ibertren que me "regaló" mi padre y que no me dejó tocar durante años :P

1: nombre que actualmente tengo reservado para arruinar la vida de mi (remotisísimamente) hopotetiquísimo primogénito, que ha tomado el relevo de anteriores favoritos como por ejemplo Gillighan, Saltarín, Wifly, El-Mayor o Luke...

lunes, 3 de noviembre de 2008

Feliz

No tengo muy claro si esta cita pertenece a Charles Schulz, a su creación Snoopy o a vaya usted a saber quién. Pero el caso es que me encanta y refleja muy bien cómo me siento últimamente.

My life has no purpose, no direction, no aim, no meaning, and yet I'm happy. I can't figure it out. What am I doing right?

Ahí queda eso.

domingo, 12 de octubre de 2008

Volver a empezar

Primer día de piscina ayer, en un desesperado intento por compaginar un mínimo de actividad que evite el anquilosamiento durante las semanas que todavía me quedan de reposo forzado y el respeto escrupuloso a los tiempos de recuperación de mis maltrechos tobillos.

Pocas veces me he sentido más perdido en mi vida. En apenas diez largos a la piscina terminé tan fatigado como después de las series de 2K que me metía en las pistas de atletismo de la uni y con los brazos absolutamente extenuados, en una prueba más de mi total ausencia de fuerza en el tren superior. Por no hablar de mi formidable técnica natatoria, sólo comparable a la gloriosa actuación de Eric La Anguila Moussambani en las olimpiadas de Sydney.

Semanas por delante para irme adaptando a un deporte nuevo en un medio extraño y hostil. Si el Mostruo Espagueti Volador quisiera que nadásemos nos habría dotado, en su tallarinesca sabiduría, de unas prácticas aletas :P

A ver cuándo puedo volver a correr y volver a la tierra firme a la que pertenezco. Mientras tanto me tendré que conformar con este sustitutivo...

viernes, 3 de octubre de 2008

Aterrador

Durante el próximo mes y medio me aguarda un ritual diario de ejercicios de rehabilitación y masajes para intentar recuperar de una vez una lesión que arrastro desde junio y que compliqué estúpidamente al empeñarme en participar en la Subida ao Aloia cuando el sentido común me decía que no era la mejor de las ideas.

Ante semejante panorama, el párrafo que me encontré ayer en Corre, Spanjaard (uno de los mejores blogs que se escriben sobre este submundo de correr y similares) me resultó especialmente aterrador. Copio y pego vilmente:

El contacto con el suelo se dispone en tres vectores de fuerza: el vertical (peso del cuerpo), el avance y la resistencia en el impacto. La suma de las tres se debe disipar en la 1/3 parte del tiempo que se utiliza caminando. En unas dos décimas de segundo. El corredor impacta sobre el suelo entre 50 y 70 veces por minuto con cada pie, o sea, disipar hasta mil impactos en un km. Más frecuencia para corredores ligeros, de elite, que pueden pesar entre 48 y 60kg, o menos frecuencia para corredores lentos pero de hasta 100kg. En ambos casos, entre 40 y 50 toneladas de fuerza por kilómetro. El calzado pierde absorción de impacto con el uso. La dinámica de cada pisada es diferente y casi nunca perfecta. La inclinación del terreno, los peraltes, etc. Todo influye en la ruta de la absorción de impacto, según leo en un sitio especializado. Pásmense: arco medial del pie, músculos laterales de la pierna baja y membrana entre la fíbula (lateral de la rodilla), biceps femoral, tuberosidad de los isquios hacia el glúteo máximo y músculo sacroiliaco, Multifidus y porciones mediales de las lumbares. A veces obligamos a los abdominales transversales a mantener el equilibrio del cuerpo en la zancada. Las conclusiones, así, son demoledoras en favor de esa máquina que parece tan deteriorada o fofa o canija que es nuestro cuerpo, pero que finalmente funciona como un gran amortiguador para los impactos mientras corremos (por mal que corramos). Cualquier músculo rígido o acortado, o desalineamiento de articulaciones, puede interferir en la disipación es esas fuerzas y derivar en lesiones crónicas que aparecen en cuanto incrementemos la distancia corrida.

Da mucho miedito. Me temo que además de recuperarme la lesión en sí también tendré que perder el miedo a la recaída.

Y sólo quedan 204 días para MAPOMA 2009. Empiezo a pensar que no llego...

lunes, 22 de septiembre de 2008

¿Qué es eso que se ve al final del túnel?

Parece una luz.

¡Dios mío, cada vez se está haciendo más grande!

¡¡Me deslumbra!!

Convocatoria de septiembre legendaria. Sistemas, TDS y μOndas a la saca :)

Empiezo a ver el final de esto. Si no fuera por la maldita pájara que llevaba encima el día del examen de Medios las habría aprobado todas y tendría ante mí un curso de extrema ociosidad sólo superado por el añito cuasisabático que se va a marcar Iago. Pero bueno, no me quejo. Hace un año hubiera firmado esta situación con los ojos cerrados.

La buena noticia de la nota de μOndas al mediodía me levantó el ánimo tras la mala con la que había empezado la mañana. La fisio confirmó mis peores temores, tengo unas tendinitis tremendas en ambos tendones de Aquiles que por si fuera poco están a tiro de piedra de convertirse en unas formidables fascitis. Evidentemente, esto me obliga a decir adiós a la Meia Maratona de Portugal (aunque el viaje a Lisboa sigue en pie) y también a la carrera del CSIC. No sé cuándo podré volver no ya a competir en populares, sino simplemente a correr. Porque esto tiene muy mala pinta y me temo que pueda ir para largo. De hecho en la consulta se llegó a insinuar la aterradora posibilidad de que si esto se agrava me vea obligado a abandonar mi (palabras textuales, señora) "carrera deportiva" :S Si querían asustarme lo han conseguido. A Cthulhu pongo por testigo que en cuanto me recupere tendré más cabeciña y no correré con molestias...

¿Pero sabéis qué? Hoy en el fondo me da todo igual. El momento para darme malas noticias era éste. Con tanta felicidad encima es imposible que me duela nada ni que ningún problema me quite el sueño :D

martes, 2 de septiembre de 2008

City Chase Madrid (y un hasta luego, ya que estamos)

Descubro gracias al blog de Musgo Aventura que en octubre se celebra en Madrid una prueba de la City Chase.

Una City Chase es grosso modo una especie de gymkana en la que hay que ir haciendo el ganso por la ciudad, superando pruebas tan abracadabrantes como aparcar un Smart con los ojos vendados, jugar al tenis sobre camas elásticas, resolver un sudoku bajo la amenaza de poner tu peinado al servicio de la creatividad de unos peluqueros de Chueca y demás marcianadas del estilo.

Puede estar gracioso. Ésta es una de las escasísimas ocasiones en las que muestro algo parecido a iniciativa, a ver si triunfa más que la sugerencia anterior de irnos a Cercedilla a dar chimpos entre los árboles ;-)

Mmm... Creo que empiezo a comprender lo que siente David proponiendo cosas que nunca hacemos :P

En otro orden de cosas, mañana vuelvo a la dura realidad botellil. Voy para allá con un peso que no sé si calificar de minúsculo o ridículo (lo que es curiosísimo ya que este verano ha sido de lo más sedentario por culpa de los tobillos) y miedo me da cómo puedo volver después de unos quince días comiendo esa comida y bebiendo ese café... Por no hablar del reencuentro con ese ambiente cañadiense <irónico>que tanto me gusta</irónico>. Lo que me hace más ilusión es volver a encontrarme con esas máquinas de Disival Vending que, como aquel anuncio del Atleti, me matan y me dan la vida.

Es por ello que este vuestro blog favorito dejará de actualizarse unos cuantos días. Pero tranquilos, que no cunda el pánico, podréis estar al tanto de mis instrascendencias en Twitter xDDD

El 99% (aprox) de los que leáis esto seguramente nos veamos el viernes, ¿no? ¡¡Hasta entonces!!

Paleofrikismo II: Aquellos infames sacacuartos

Como ya amenacé en un comentario en el anterior post paleofriki, tenía un armario lleno de cartas acumulando polvo listas para ser fotografiadas y comentadas :)

La elección está clara cuando hay que escoger entre empezar a hacer las maletas para irme mañana o pasar el rato recordando mis inicios en el frikerío. La procrastinación me puede, soy así de débil.

La calidad de las fotos es bastante infame porque aproveché para experimentar con el macro de la cámara sin mucho éxito.

Doomtrooper



Si la memoria no me falla fue el primer JCC traducido al español. La tercera edición de Magic era el hype del momento en los círculos roleros y tenía unas ganas locas de probarlo, pero sólo estaba en inglés y me temía que no iba a ser capaz de engañar a nadie para jugar a un juego sin traducir. Así que cuando salió a la venta el primer juego medianamente parecido a Magic en castellano me abalancé sobre él. Desgraciadamente resultó ser bastante infame y quedó relegado al olvido enseguida. Lo único positivo que saqué de él fue que años después pude cambiar algunas cartas por otras más interesantes (para mí, al menos) de Magic. Doomtrooper pasó sin pena ni gloria, y el aprobado raspado que tiene como media en BGG me parece excesivamente generoso.

Star Wars



A pesar de estar en inglés, para jugar a este juego sí que logré engañar a alguien. Y es que por aquel entonces en mi grupo de amigos éramos muy fans de Star Wars. Los VHS de la trilogía original eran una de mis posesiones más preciadas y leíamos con avidez las novelas del universo expandido de Timothy Zahn, así que tampoco me costó demasiado colocar este juego. Al final no terminó de cuajar y apenas logré jugar unas pocas partidas, pero guardo buen recuerdo de él. El sistema de juego era bastante interesante. Era algo así como que las cartas que te quedaban en tu mazo representaban la energía que te quedaba y el fluir de la fuerza, estaba bastante conseguido. El juego tuvo cierto éxito, al menos en el mercado americano, llegando a vender más que Magic algún que otro mes. Con la llegada de la nueva trilogía la editorial original perdió la licencia y se creó otro juego nuevo basado en la franquicia.

Magic



Y entonces por fin llegó la locura de Magic a España. La editorial Martínez Roca se hizo con los derechos del juego y lanzó la cuarta edición traducida a nuestro idioma. Era fácil de aprender, rápido de jugar, divertido... Lo tenía todo, salvo que era un maldito sacacuartos publicado por una banda de fenicios cuyo único fin en esta vida era exprimir a los aficionados hasta sacarles hasta el último euro la última peseta. Además empezó a imponerse un estilo de juego más parecido a un catenaccio que a otra cosa, que convertía las partidas en algo tedioso. Un par de años después de empezar terminé desencantado del juego y del ambiente enrarecido que se creó a su alrededor. Aún hoy en día sigue siendo el JCC por excelencia, y pobres e incautos jóvenes siguen cayendo todavía en sus redes. Pobriños.

El Señor de los Anillos



Mi favorito de entre todos los que he jugado. El espíritu tolkeniano estaba bastante conseguido y pasé muy buenos ratos jugando a él. Quizás no fuera tan rápido y sencillo como Magic (con lo que atraer a gente se hacía más complicado), pero lograba enganchar si le pillabas el punto. Y si eras fan de los libros ya ni te cuento. El juego desapareció a finales de los 90 tras la quiebra de ICE y posteriormente se lanzó uno nuevo aprovechando el tirón de las adaptaciones cinematográficas.

X-Files



Poco que contar sobre éste. Lo compramos en Irlanda para pasar los ratos muertos. Bastante maliño, pero cumplió con su propósito haciendo más llevaderos los trayectos de alguna que otra excursión. La mecánica consistía en intentar descubrir cuál era el Expediente X de tu rival, conseguiendo pistas en localizaciones y apuntándola en unas hojas especiales que te daban (gratis, cosa rara en este mundillo) en las tiendas. Cada combinación de pistas se correspondía sólo con un Expediente determinado. El primero en acertar ganaba. Un juego tan mediocre como éste era una buena muestra de lo saturado que estaba el mercado por entonces. Ahora no sé cómo estará, pero supongo que se habrá hecho una buena limpia...

L5A



Años y años después de haberme desintoxicado de este inframundo de cartas coleccionables, volví a caer como un tonto. Afortunadamente intuí el peligro antes de que fuera demasiado tarde y logré ponerme a salvo :P El juego en sí estaba bastante bien y posiblemente sea el mejor al que haya jugado. Además la ambientación de L5A es genial, llena de politiqueos, épica, magia, puñaladas traperas, onis y hombres rata. ¿Qué más se puede pedir? Éste es el que está más al fondo de el armario porque es el único al que verdaderamente tengo miedo de reengancharme. A ver si alguien se anima a dirigir alguna partida al juego de rol y me quito de tentaciones de cartitas ;-)


Y aquí termina este paseo por las más profundo e inútil de mi memoria. Algún día intentaré comprender por qué recuerdo detalles de un juego insignificante al que sólo jugué unas pocas semanas allá por 1997 y en cambio soy incapaz de recordar cosas verdaderamente útiles como por ejemplo cuándo fue la última vez que le cambié el aceite al coche... Me acordaré de la absurdez de mi memoria si mañana el motor empieza a echar humo en medio de los páramos castellanos.